Halloween 2024: Esas americanadas tan nuestras
Hace apenas 48 horas se ha llevado a cabo en más de medio mundo la famosa noche de Halloween y un servidor, como cada año, se acuerda del mensaje que se encontraban todos aquellos acólitos de esta celebración cuando, la noche previa al 1 de noviembre, Día de Todos los Santos, o el «Día de los Muertos», como por aquí solemos denominarlo, se acercaban a aporrear la puerta de un vecino cualquiera con la única misión de que este les ofreciera caramelos o algo por el estilo:
“¡Ni truco, ni trato! Esto es Madrid, no New York, ni Boston. Pdta.: Volver dentro de un mes y medio con la zambomba y a pandereta y la zambomba y os daré el aguinaldo”. A decir verdad, no conozco exactamente la mecánica de la famosa fiesta yanqui (aunque su origen sea Irlandés) que hemos importado, como no, a este país de los horrores. Porque ya sabemos que en eso somos genios con patas, en lo de copiar todo este tipo de eventos convertidos en un negocio mil millonario y que, ignorantes de nosotros, lo tomamos como una inocente celebración más.
